20 jul 2010

El cuento que buscaba escritor y acabó de subsecretaria

Y nada, que no lo encontraba. Los escritores, a menudo idiotas, rechazaban una y otra vez este cuento, pero es que el cuento, como comprobaréis en seguida, era malísimo.
Deprimióse el cuento, pues, y pidió consejo al ministerio de cultura, pero su instancia no llegó demasiado lejos, pues "cuento" sonaba a viejuno y franquista y conservador, así que el cuento se hizo microrrelato y se operó las pelotas (quitándoselas), se quitó también todo lo que le venía de antaño (la educación, la cultura, la imaginación no culposa, la experiencia y la sabiduría), se puso dos hermosas aldabas y una reveladora "a" final. Microrrelata, mucho más progresista y plural que cuento, dónde va a parar, subió como la espuma por las oficinas del ministerio de cultura y llegó al despacho más alto; la ministra, alucinada por el maravilloso producto que tenía entre manos, quiso publicarlo, perdón, publicarla, enseguida. Pero de tanto que se había quitado, ya no le quedaba nada de literario, era sólo una mierda iletrada pero con el aspecto inmejorable que tiene una subsecretaria general de loquesea con el armario lleno y la cabeza vacía. Un alma gemela, dijo la ministra.
Y fue así que el otrora cuento y ahora microrrelata acabó de subsecretaria de nuevas inciciativas, una subsecretaría transversal, pues se surtía de fondos de los ministerios de cultura y del de idiotez.

6 comentarios:

  1. Un inicio muy prometedor. Y un gran indicio que alguien tan famoso como yo, Casi Nadie Vergara, se apunte a esta iniciativa, o iniciativaa.

    No sabes cuanto me ha alegrado leerte. Un abrazo

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  2. Pues que la transversalidad es para mi lo importante...¡pedazo de escritora!

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  3. Los cuentos es que lo tienen muy difícil. Como ahora hay que mirarlos con lupa y la banda censora de lo políticamente correcto está al acecho para que sean igualitarios y transmitan los valores de la sociedad democrática de hombres y mujeres progresistas que en realidad somos, es difícil que un cuento apruebe y pueda ser como los del papel de fumar mandan. Entre eso, y que ahora los niños son más blandos de mente y los padres censuran también los clásicos no sea que les dé un ataque de pánico porque el lobo derriba a soplidos la casita y el rey de la casa tenga pesadillas, más que difícil lo tienen imposible.
    Imagino que la siguiente fase de la microrrelata será el/la microrrelat@, y en él un macho humano (perverso por definición) será redimido por los valores progresistas. Así puede poner dinero también el ministerio de igualdad. Y si en lugar de letras tiene mayormente ilustraciones, podrá distribuirlo Público los fines de semana.

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  4. De hecho, la doble a, linmer, es doblemente iniciática. No somos nadie, es cuanto se me ocurre decir.

    Transversal, como dices, Gandula, y un poco putilla, además, seamos claros. ¿Y lo que molan las que son un pelín golfas...!

    Es verdad, Guiss, ahora que si Blancanieves es machista o si La Bella Durmiente es facha y memeces por el estilo. España no tiene remedio. Ahora se les ha quitado el miedo a la bandera, solo falta que, además, se les quite el miedo a los libros a nuestros compatriotas y nunca vuelvan a elegir a un idiota como presi.

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  5. Por supuesto... reivindiquemos los cuentos y los cuentistas.

    Prometedor blog.


    Perséfone

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  6. Perséfone... me suena a conocido que no quiere admitirlo. Respetémoslo, pero que conste que me pica la curiosidá.

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